La quema de las hojas secas de los árboles libera monóxido de carbono perjudicial para el ambiente.

El INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) publicó un folleto informativo mediante el cual alerta a la comunidad sobre los perjuicios al        ambiente que genera el humo producto de la quema de las hojas secas del otoño.

En ese sentido, recomienda barrer las hojas de la vereda y colocarlas sobre el pasto junto con las que ya están en el jardín.

Por otra parte, aconseja regarlas con poca agua para que no se vuelen con el viento y se acelere su descomposición. De esta manera, se abona el      suelo de manera simple y natural.

   “Tal vez no se vean bien tu jardín con todas esas hojas encima pero pensá que la naturaleza tiene otra lógica a la nuestra y eso que parece feo esconde la belleza futura del jardín”.